Hay muchas dietas diferentes relacionadas con problemas intestinales. Puedes encontrar mucho escrito sobre Colon irritable y la alimentación, y en el blog he hablado varias veces sobre fórmulas y conceptos generales. Lo cierto es que en cuanto a dietas para el Colon Irritable no existe una solución única y universal.

Por un lado, hablamos de dieta en lenguaje coloquial cuando nos referimos a un conjunto de ideas o alimentos aconsejados o, al contrario, a evitar. Pero existen dietas formales que se ciñen a protocolos de control y sistemas de alimentación mas sofisticados.

En cualquier caso, si bien la dieta para el Colon Irritable probablemente no va a solucionar el problema de raíz, parece estar cada vez más claro en la comunidad médica y científica que es una herramienta muy importante para el control de síntomas. En ese plano, explico aquí las dietas más populares y con soporte científico:

Dieta FODMAP

Esta dieta fue creada en la Universidad Monash en Australia, como tratamiento para el Colon Irritable. El mecanismo de la dieta consiste en eliminar ciertos carbohidratos fermentables: en Inglés Fermentable Oligosaccharides, Disaccharides, Monosaccharides And Polyols.​ En Español: fructo-oligosacáridos (FOS), galacto-oligosacáridos (GOS), monosacárido y polioles.

Algunos alimentos FODMAP comunes son la leche y derivados, el brocoli, la fructosa, el trigo y las legumbres. En esta dieta se cataloga a los alimentos por su contenido en FODMAPs, normalmente divididas en “bajo nivel de FODMAP” para indicar el consumo normal, “medio nivel de FODMAP” para indicar consumo moderado, y “alto nivel de FODMAP” para sugerir que se eviten esos alimentos.

No obstante, cada persona que se ciñe a una dieta FODMAP debe evaluar en su caso qué alimentos entre esos disparan en mayor medida los síntomas en su caso.

Esta dieta, por otro lado, es una dieta que uno no debería mantener en el tiempo más de unas semanas, como forma de evaluar y controlar síntomas, para después volver a una alimentación normal y evitando aquellos alimentos que sí hayan mostrado un impacto mayor. Siempre con control de un profesional.

La dieta FODMAP no es excesivamente restrictiva y puede ser relativamente fácil de llevar, comparada con una dieta elemental o una dieta Fast Tract. En su contra, puede ser que esta falta de restricción no logre resultados suficientes en algunas personas.

Descarga aquí un par de modelos de dieta FODMAP:

• Propuesta FODMAP de la Fundación Española del Aparato Digestivo
• Propuesta FODMAP de la Asociación Española de Gastroenterología

La dieta Cedars-Sinai de baja fermentación

Esta dieta fue creada por Mark Pimentel, Director del Programa Asociado de Ciencia y Tecnología Médica en Cedars-Sinai. La dieta está orientada al tratamiento del Síndrome de Intestino Irritable y a evitar recaídas después de un tratamiento de SIBO con antibióticos.

Esta dieta trata de reducir la ingesta de carbohidratos complejos (pastas, cereales, frutos secos, legumbres, quesos, etc.) que tienen más probabilidad de fermentar en el estómago. En su lugar, es más permisiva con carbohidratos simples que se digieren más rápido (arroz, miel, chocolate, por ejemplo).

Si eres vegetariano, esta dieta es una de las más fáciles de seguir. En realidad, es un conjunto de recomendaciones y de ideas de alimentación. Puedes descargar aquí una versión resumida en inglés.

Si tus síntomas son muy severos, esta dieta al igual que la FODMAP, podría ser insuficiente.

Descarga aquí el documento en Inglés de la dieta de baja fermentación Cedars-Sinai.

La dieta Fast Tract

Esta dieta fue creada por el Dr. Norm Robillard (microbiólogo) con la idea de evitar los carbohidratos fermentables en una forma adaptada a cada individuo, a través de un cálculo que permite saber el grado de fermentación que una cantidad determinada de un tipo de alimento es capaz de producir. Eso lo llama “Potencial de Fermentación” (PF).

Dependiendo de la severidad de tus síntomas, se te asigna un número de PF, y ese es el máximo por día que puedes ingerir. Para saber qué alimentos y en qué cantidad puede consumirlos, creó una APP que te ayuda a obtener los Puntos de Fermentación de cada comida.

Esta dieta puede hacerse muy restrictiva o menos dependiendo del grado de tus síntomas. Es una dieta adaptable y personal, y al mismo tiempo claramente medible.

El inconveniente de esta dieta es que necesitas en control por la APP, ya que de otro modo es difícil seguir. Aún con la APP (yo la he probado y es cierto que puede reducir los síntomas) necesitas voluntad y disciplina para darle seguimiento.

Es una dieta conceptualmente simple, pero operativamente complicada de ejecutar.

La dieta elemental

Bien, la dieta elemental es algo muy particular, ya que esta dieta es un tratamiento específico bajo ciertas situaciones que deben ser controladas por un médico. Nunca debes hacer una dieta elemental por tu cuenta, del mismo modo que no debes tomar un medicamento por tu cuenta.

Un médico solo probaría esta dieta si todo lo demás ha fallado incluidos tratamientos con medicamentos, o bien si el paciente no puede tolerar antibióticos en un tratamiento de SIBO severo.

Esta dieta se sigue durante un par de semanas, normalmente, y es una dieta líquida en la que se suministran los nutrientes mínimos vitales para una persona a lo largo de un día. Las proteínas incluidas en estos batidos tienen la estructura rota en aminoácidos, para liberar al estómago de ese trabajo y así facilitar la digestión.

El sabor de estos productos es muy malo, aunque algunas marcas hacen lo posible para que se pueda tolerar. Como esta dieta tiene bastante azúcar y además no incluye bacterias saludables necesarias en un intestino normal, puede causar un problema importante a diabéticos por un lado, y a personas normales por otro lado, poniéndolas en riesgo de infecciones y desnutrición o pérdida de peso significativa.

En resumen, recuerda que esta dieta es un tratamiento médico, no una dieta que las personas podemos hacer por nuestra cuenta. Yo nunca he probado esto, obviamente.

¿Qué dieta para el colon irritable es mejor? ¿Y en casos de SIBO?

Todas estas dietas tratan de atacar el problema de la malabsorción de carbohidratos. Este es un problema que está presente en muchos casos de SIBO, ya que la dificultad de absorción y su fermentación en el intestino causa varios de los incómodos síntomas que sufrimos (gases, estreñimiento y diarrea).

Entonces, como has podido ver, las dietas evitan o regulan en diferente medida la ingesta de carbohidratos o bien de un conjunto de carbohidratos específicos.

Si bien algunas de estas dietas pueden ser mantenidas en el tiempo, como la Cedars-Sinai o la Fast Tract (aunque esta sea muy tediosa), las otras dos se aplican en momentos específicos. Te aconsejo consultar a tu médico o nutricionista para evaluar qué es adecuado en tu caso, y dentro de un tratamiento médico profesional.